La irritabilidad uterina o útero irritable en la embarazada es un síndrome caracterizado por la presencia de contracciones antes de tiempo (extemporáneas), existiendo el riesgo de parto prematuro. Estas contracciones pueden ser muy variables en frecuencia e intensidad, pudiendo ser aisladas y débiles o, por el contrario, intensas, dolorosas y notarse en intervalos muy cortos de tiempo.
¿Por qué ocurren estas contracciones antes de tiempo?
El síndrome de las contracciones antes de la semana 37, momento en que se considera que el embarazo ha llegado a término y es totalmente normal y necesario que el cuello uterino se dilate hasta los 2,5 o 3 cms., se produce cuando tiene lugar una relajación activa del útero (lo que se conoce como “quescencia uterina”) antes de tiempo.
Entonces se comienzan a producir una serie de hormonas que provocan las contracciones uterinas y, consecuentemente, una serie de cambios en el cuello uterino, que comienza a ablandarse, acortarse y dilatarse.
Causas de la irritabilidad uterina
Aunque en ocasiones los motivos de estas contracciones extemporáneas son desconocidas, existen una serie de causas que predisponen a tenerlas:
- Deshidratación.
- Infecciones urinarias.
- Infecciones vaginales.
- Estrés o ansiedad de la madre.
- Embarazo múltiple.
Diagnóstico y tratamientos
La evaluación de la irritabilidad uterina se realiza normalmente a través de un examen pélvico y el estudio con monitor fetal. En función de los resultados de dicha valoración, las causas concretas de las contracciones prematuras, el momento del embarazo y la probabilidad de parto prematuro, el equipo médico recomendará o prescribirá alguno de los siguientes tratamientos:
- Reposo relativo o absoluto.
- Prescripción de medicamentos.
- En ciertos casos se puede realizar una pequeña intervención quirúrgica denominada cerclaje de cérvix, consistente en estrechar el cuello uterino en aquellos casos en que existe riesgo de parto prematuro o aborto espontáneo.
No hay que confundir la irritabilidad uterina con las contracciones de Braxton Hicks
Conviene distinguir entre el síndrome del útero irritable, que pueden ser causa de parto prematuro, y las contracciones de Braxton Hicks. Estas se producen normalmente a partir de la semana 20 de gestación y forman parte del proceso normal de preparación natural para el parto. Este tipo de contracciones se producen por la contracción y endurecimiento del útero y, aunque pueden resultar molestas, suelen ser indoloras y de corta duración: unos 30 segundos aproximadamente.
Este tipo de contracciones abarcan todo el útero, empezando en la parte superior y extendiéndose gradualmente hacia abajo. A medida que el embarazo avanza, las contracciones de Braxton Hicks se van volviendo progresivamente más frecuentes, duraderas e intensas.
¿Cuándo tengo que acudir al médico?
Si estás embarazada de menos de 36 semanas, debes acudir al médico de inmediato si sufres contracciones frecuentes y/o intensas (más de 4 por hora) o estas van acompañadas de: dolor de espalda o de la pelvis o cualquier tipo de flujo vaginal extraño o inusual.