A medida que el embarazo llega a su término son muchas las futuras mamás que se preocupan, a veces en exceso, por saber cuándo se encaja el bebé para poder tener un parto vaginal (sin cesárea). Es normal que una serie de cuestiones relacionadas con esta cuestión revoloteen sin descanso por sus mentes: en qué semana debería estar encajado el bebé, cómo saber si ya se encuentra bien posicionado, qué se nota en este caso….
A continuación desvelamos 5 claves con información básica sobre esta cuestión, cuyo conocimiento seguro que va a tranquilizar a las mujeres embarazadas a las que ya les falta poco para dar a luz.
1. ¿Qué significa que “el bebé está encajado”?
Esta expresión común se utiliza para expresar que el bebé está preparado para salir al exterior mediante un parto vaginal.
En contra de la creencia popular, no existe una única posición óptima. Por lo general, hacia el octavo mes de embarazo aproximadamente la cabeza del bebé se va introduciendo en la pelvis, ya que es la parte de la criatura que normalmente aparece primero (es lo que se conoce como posición cefálica) Pero también puede ocurrir que sean las nalgas la parte que descienda y se encaje en el hueso pélvico (posición podálica).
Aunque la posición cefálica anterior es la postura ideal para un parto vaginal sin complicaciones, es decir, el bebé boca abajo con su cabecita mirando hacia la columna vertebral y encajado en el hueco de la pelvis, la postura podálica también puede ser perfectamente válida.
Desde un punto de vista médico y técnico, se considera que ya se ha producido el encajamiento del bebé cuando la parte más ancha de la cabeza (de unos 9,5 centímetros de longitud) supera el estrecho superior de la pelvis y la parte que más sobresale del ovoide fetal se sitúa al mismo nivel de las espinas ciáticas.
2. ¿En qué semana se encaja el bebé?
No podemos hablar de una semana exacta, pero sí de unas fechas aproximadas. El encajamiento se produce entre las semanas 33 ó 34 y las semanas 37 y 38.
Es en este periodo de tiempo cuando, por norma general, el bebé ya está encajado en la pelvis de su madre.
3. ¿Cómo se puede saber si el bebé está encajado?
Existe un signo muy evidente que te confirmará que tu bebé ya está encajado: notarás que tu barriga desciende y se inclina hacia delante.
Además de este cambio de posición de la barriga hay otra serie de síntomas menos claros y no siempre presentes relacionados también con el encaje del feto:
- La mujer embarazada deja de sentir tan intensamente la presión producida por el útero y el feto sobre el diafragma.
- También se reduce la sensación de asfixia y de empacho, pudiendo volver a tomar comidas más completas.
- En contrapartida, se produce un aumento de la presión en las siguientes zonas: vejiga, articulaciones de la pelvis y zona perineal.
- La presión de la cabeza del feto sobre la pelvis puede provocar punzada y calambres.
- Algunas mujeres refieren sensaciones de pérdida de equilibrio.
4. ¿Es imprescindible que el bebé esté bien encajado para que se produzca el parto vaginal?
Ya sea en posición cefálica o en posición podálica, el bebé debe estar encajado en la pelvis para que se produzca un parto natural. De no ser así, lo más probable es que se deba recurrir una cesárea.
5. ¿Se puede provocar el encaje del bebé?
Si te encuentras al final de tu embarazo y tu bebé no está bien encajado es recomendable hacer ejercicio moderado, como caminar o pilates, o bien realizar ejercicios específicos consistente en presionar el abdomen de la madre con una serie de masajes. De cualquier modo, este tipo de acciones no son garantía de éxito.