Una preocupación común en muchas embarazadas es cómo afrontar durante estos meses la convivencia con su mascota y si ésta puede influir de alguna forma en el desarrollo del feto. En estos casos también es habitual que la futura madre se pregunte cómo sus animales recibirán al nuevo miembro de la familia y si la convivencia de bebés y mascotas será complicada.
En este post abordamos todos los aspectos que debes tener en cuenta sobre la relación entre animales y embarazo.
Animales y embarazo: ¿Qué precauciones debo tomar?
La convivencia con tus mascotas no debe interrumpirse estando embarazada, pero es conveniente que tomes ciertas precauciones.
Lo recomendable es que, una vez confirmes tu embarazo, le comentes a tu ginecólogo que vives con una mascota. Especialmente en el caso de gatos y mujeres embarazadas se aconsejará la realización de una prueba para saber si has pasado la toxoplasmosis, una enfermedad grave si se contrae durante la gestación.
En una segunda fase deberás llevar a tu mascota a una revisión para comprobar que su cartilla de vacunas está actualizada. El veterinario te dará indicaciones para preparar a tu mascota para la llegada del bebé y te explicará cómo convertir la relación entre bebés y mascotas en positiva para ambos desde el primer momento.
Cuidado de gatos y perros en el embarazo: 4 claves
- Cuida que tus mascotas estén sanas y controladas periódicamente por el veterinario. Si lo deseas puedes realizarles un completo chequeo cuando confirmes tu embarazo.
- Evita que los animales olisqueen o chupen la comida de la familia.
- Tras tocar a las mascotas la embarazada debe lavarse bien las manos, especialmente si va comer o manipular alimentos.
- Se aconseja que, durante estos meses, no sea la embarazada quien se encargue de la limpieza de las mascotas o de sus enseres. En caso de tener que hacerlo conviene que sea especialmente cuidadosa, utilice guantes y se lave bien las manos.
¿Qué parásitos pueden contagiarme mis mascotas?
Desparasitación y especial precaución con la higiene de tu mascota son claves en la convivencia con animales en el embarazo. Los perros pueden transmitir algún tipo de parásito, aunque casi siempre son inofensivos. Diferente es la relación entre gatos y embarazo humano, donde el riesgo aumenta por la toxoplasmosis.
La toxoplasmosis es una enfermedad infecciosa ocasionada por el protozoo Toxoplasma gondii. Puede vivir dentro de las células de los seres humanos y de los animales, sobre todo de los gatos, y su presencia pasa desapercibida casi siempre, pero no durante el embarazo ya que, además de provocar dolor de cabeza y dolores musculares a la gestante, también puede atravesar la placenta e influir negativamente en el desarrollo del bebé ocasionándole daños permanentes.
Para comprobar si tienes anticuerpos de toxoplasmosis es necesario realizarse un análisis de sangre. Si convives con gatos en el embarazo el ginecólogo puede realizarte esta prueba varias veces a lo largo de la gestación para evitar riesgos.
Por último, hay que recalcar que la toxoplasmosis no se transmite simplemente estando en contacto con el gato o acariciándolo. Si éste no tiene el parásito la convivencia con él es totalmente segura. Aún así conviene tener en cuenta que tu gato puede contraer este parásito en cualquier momento si come carne cruda.
La enfermedad estará presente en sus heces, por lo que es importante que no sea la mujer quien se encargue de este aspecto de la limpieza de la mascota. Evitar que el gato salga de casa y que esté en contacto con otros animales que puedan infectarle puede también ayudar a prevenir el contagio de toxoplasmosis.
Prepara a tu mascota para la llegada del bebé
La llegada de un nuevo miembro altera la rutina de toda la familia, también de las mascotas. Sin embargo, la relación entre bebés y mascotas suele ser positiva y enriquecedora, y tiene muchos beneficios:
- La convivencia de bebés con animales hace que los niños se inmunicen antes y tengan menos riesgo de tener alergias.
- A nivel emocional, los convierte en más empáticos con su entorno y en más responsables.
Algunos estudios incluso aseguran que cuidar bebés y mascotas de forma conjunta favorece que los primeros desarrollen mejor su sistema psicomotor.
Estos consejos también pueden ayudarte a que la convivencia de bebes y mascotas sea más fácil, sobre todo al principio:
- Muchas parejas con perros o gatos, ya en el embarazo, permiten poco a poco que su mascota olisquee la barriga de embarazada y la ropa del bebé. De esta forma, cuando éste llegue, es más fácil que lo reconozca como un miembro más de la familia.
- Conviene dar a la mascota cierta independencia. Si cuando llegue el bebé los cambios son bruscos podría desarrollar celos hacia él.
- Nuevas normas de convivencia. Se trata de pequeños gestos para que la convivencia de animales y los bebés sea más fácil. En el caso de los perros, especialmente, es importante que aprendan a saludar sin saltar, jugar sin morder, soltar los objetos que tiene en la boca y diferenciar entre sus juguetes y los del bebé.
- También se recomienda introducir tanto juguetes que hagan ruidos como otros enseres del niño (carro, algunos productos de limpieza para que reconozca el olor, etc.) en la casa para que la mascota se acostumbre a su presencia y no la perciba como una amenaza.
Asegura el crecimiento sano de tu bebé
Durante el periodo de embarazo son muchas las medidas que debes tomar, debes tener en cuenta las pruebas que tienes que realizarte en el embarazo para asegurar que el bebé nacerá sin anomalías.
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