El zumba es una actividad física que mezcla ritmos latinos (salsa, merengue, flamenco o bachata) con ejercicios aeróbicos, que ha alcanzado una gran popularidad por ser muy divertido y eficaz para estar en forma y perder peso.
Si antes de quedarte encinta ya practicabas esta modalidad es muy probable que quieras seguir con esta rutina durante el embarazo. En este caso estás de enhorabuena, puesto que el zumba en el embarazo es recomendable y seguro, siempre que tomes algunas precauciones y adaptes su práctica a tu nuevo estado.
Zumba en el embarazo: beneficios y algunos riesgos
Si colocas en una balanza las ventajas de la práctica de zumba en el embarazo por un lado y por el otro los posibles riesgos, sin duda el peso se va a decantar por el costado de los beneficios, puesto que son muchos y las pocas desventajas mínimas y solucionables.
Ventajas del zumba
- Es un ejercicio cardiovascular muy saludable y divertido.
- Se queman muchas calorías y acelera el metabolismo, por lo que es de gran ayuda para controlar el aumento de peso.
- Mejora el tono muscular.
- Se aumenta la flexibilidad de las articulaciones.
- Incrementa la coordinación.
- Sirve para combatir el estrés, la ansiedad y las situaciones de tensión.
- Ayuda a dormir mucho mejor.
- Es fácil de practicar y no necesita de instalaciones ni material especial, por lo que no es necesario que acudas a un gimnasio.
Posibles riesgos
Los riesgos asociados con la práctica del zumba durante el embarazo son escasos pero existen. La mayoría se producen por no adaptar los ejercicios al nuevo estado, practicándolos de la misma forma que lo hacen la mujeres que no están embarazadas.
Estas son las principales situaciones de riesgo durante la práctica del zumba durante el embarazo:
- Caídas por desestabilización del cuerpo.
- Mareos y pérdida de equilibrio al realizar los giros.
Consejos para practicar zumba en el embarazo con seguridad
La clave para garantizar la seguridad y evitar riesgos innecesarios en la salud de la madre y el bebé se encuentra en eliminar los movimientos más bruscos, intensos y agresivos de esta práctica.
Para conseguir esta adaptación debes olvidarte de practicar el zumba de la misma forma que los hacías antes de quedarte embarazada, poniendo especial cuidado en los siguientes aspectos:
- Sustituir los saltos por pasos más suaves.
- Procurar mantener siempre los pies en el suelo para no perder el equilibrio.
- En las sesiones de zumba para embarazadas deben eliminarse los giros.
El zumba es un ejercicio que combina el ejercicio cardiovascular con la diversión y frescura de los bailes latinos. Por este motivo sirve para quemar calorías, tonificarnos y mantenernos en forma en un ambiente distendido y muy entretenido. Si a todo ello le sumamos que tomando las debidas precauciones no entraña apenas riesgos, no es de extrañar que se haya convertido en una de las actividades físicas preferidas por las embarazadas, que encuentran en el zumba el medio ideal para conseguir un cuerpo más sano y fuerte en un contexto relajante y divertido.
